Bienvenido, Invitado |
Tienes que registrarte para poder participar en nuestro foro.
|
Usuarios en línea |
Actualmente hay 2 usuarios en línea. » 0 miembro(s) | 2 invitado(s)
|
|
|
Pagar por leer, pagar por publicar... ¿o ninguna de las dos? |
Enviado por: fweyland - 09-17-2021, 10:46 AM - Foro: Foro general
- Respuestas (1)
|
 |
Hace poco me compartieron datos duros sobre el impacto de los gastos de publicación en revistas top.
El comunicado puede leerse aquí
En promedio, se puede pensar en un costo de 2000 dólares por artículo en revistas vinculadas a Ecología y Medio Ambiente. Por eso, es ineludible la pregunta ¿qué beneficio real tiene el gasto de la publicación de un artículo en una revista top?
Mi opinión sobre este tema es, aunque no sea políticamente correcto, taxativa: no es ético destinar esa cantidad de plata a ponerle el sello de una revista prestigiosa a un trabajo que, si es bueno, tendrá su impacto publicado en cualquier otra.
Creo que, aunque tuviera esa plata, o incluso si la pone un socio extranjero, se puede destinar a cosas mucho más productivas. Ese dinero bien puede solventar las campañas de campo de una o más tesis doctorales, financiar un buen proyecto de vinculación con la sociedad o equipar un laboratorio.
Antes de la era digital podía ser en cierta medida justificable el gasto, porque ameritaba apostar por una revista con buena distribución. Investigadores alrededor del mundo solo podían solventar la suscripción a unas pocas revistas, por lo que apostaban a aquellas que garantizaran una alta proporción de buenos artículos publicados. Pero ahora los PDF circulan fácilmente por el ciberespacio. Además, creo que la identidad de las revistas se ha ido desdibujando en favor de los repositorios y buscadores universales como Scopus. Yo jamas busco papers por revista, sino por palabras clave. Así, he encontrado papers muy buenos y útiles en revistas desconocidas o incluso no muy vinculadas a la disciplina que estudio. Si no los consigo por suscripción, es sencillo escribir un correo electrónico al autor/a o buscarlo en Research Gate.
Aunque sea incómodo plantearlo, creo que es necesario admitir que hay un componente fuerte de vanidad en la esperanza de ver el sello Nature en un paper de nuestra autoría. En la actualidad me cuesta ver otro beneficio. ¿Eso justifica sacrificar el trabajo de un potencial becario/a? ¿Avalamos esto premiando en las evaluaciones a quienes publican en Nature por sobre la relevancia de un trabajo sea cual fuere la revista donde se publica?
Quiero ser propositivo, porque pienso que los parches sobre el sistema de publicación no han resuelto nada hasta ahora. Cambia para que nada cambie. Mi propuesta es abolicionista y se basa en los siguientes puntos:
1) No más revistas, que son solo empresas con un altísimo margen de ganancia que se sirven del trabajo ad honorem de investigadores/as. Reemplazarlas por repositorios universales y de libre acceso ordenados por grandes áreas de conocimiento (y no el European Open Journal of Rear Curculionidae Legs Studies)
2) Financiamiento de esos repositorios por los gobiernos y/o por sociedades científicas en forma proporcional a su capacidad
3) Poner el esfuerzo en mejorar los motores de búsqueda
4) Crear una base de editores y revisores que, cada año, deban procesar una cantidad de artículos proporcional a los papers propios publicados. En general, se asume que la cantidad de revisiones debe ser el doble de los papers que cada cual publica. En este sistema, cualquiera puede (y debe!) ser editor/a o revisor/a de algunos papers. Lamentablemente, la experiencia personal me demuestra que no siempre los editores de revistas top son idóneos en su tarea.
Estas propuestas suenan disparatadas, lo sé, pero me baso en el lema del Mayo Francés: Seamos realistas, pidamos lo imposible. En todo caso, es un punto para discutir algo nuevo.
|
|
|
Trigo transgénico |
Enviado por: fweyland - 09-17-2021, 10:04 AM - Foro: Foro general
- Sin respuestas
|
 |
En los últimos meses se está debatiendo la posible aprobación de una variedad transgénica de trigo tolerante a sequías y resistente al herbicida glufosinato de amonio. Este desarrollo estuvo liderado por una investigadora de CONICET de la Universidad Nacional del Litoral en asociación con la empresa Bioceres.
La posibilidad de aprobar este desarrollo tecnológico no estuvo exenta de debate hacia el interior de los últimos gobiernos. La razón principal fue la resistencia de Brasil (principal comprador de nuestro trigo) a aprobar su comercialización. Sin embargo, a partir de 2019 se ha impulsado con mayor énfasis desde sectores del gobierno que no parecen tener relación con la agricultura o el ambiente, pero cuyos funcionarios están vinculados a los intereses de las empresas biotecnológicas.
Surgen muchas reflexiones que podemos debatir como ecológos/as, estas son solo algunas:
1) Hace unos años también hubo un gran debate en torno a la Ley de Semillas y se discute y cuestiona cómo las empresas multinacionales presionan para legislar en favor de sus intereses, lo cual genera conflictos en países con inseguridad alimentaria. Acá una interesante fuente del debate aqui
Llama la atención un doble discurso en esta temática donde parece que muchos coincidimos en la necesidad de frenar los intereses de empresas multinacionales, pero queremos reproducir sus tácticas. Es necesario señalar que el evento de la soja resistente a sequia se
celebra por ser un patentamiento nacional. Entonces surge la pregunta: ¿Frente al capitalismo de empresas multinacionales extranjeras es una solución oponer un capitalismo nacionalista? ¿Las empresas argentinas son intrínsecamente más sensibles socialmente? ¿En qué posición nos pone como país y como desarrolladores de tecnología frente a sus usuarios? Es decir, ¿obligaremos a los agricultores de Paraguay (por poner un ejemplo) a pagar regalías por el uso de nuestros desarrollos e incidiremos sobre sus políticas públicas en favor nuestro? ¿Seremos el "Monsanto" de países menos agraciados con menor desarrollo tecnológico que nosotros? ¿Cuáles serán los efectos ambientales?
La investigación científica en Argentina se está orientando a la producción de patentes como indicador de éxito, eficiencia y utilidad. Este modelo no es el único posible, y un debate con otras alternativas es necesario.
2) Cuestiones ambientales: Es un argumento sostenido como un axioma que estos desarrollos biotecnológicos están orientados a producir más alimentos para una población mundial creciente. No es un debate cerrado que la solución a la necesidad de alimentos se resuelve con mayor producción. Aspectos de tipo político como distribución, precios y especulación financiera son también una parte significativa del problema y, por lo tanto, de la solución. No se puede nunca olvidar que los discursos son fogoneados por actores con intereses muy fuertes en el tema. Los alimentos hoy día son un commodity y su producción está motivada por ganar dinero y no por producir alimentos para una población hambrienta. No es intrínsecamente malo querer ganar dinero, pero el objetivo noble de alimentar al mundo se muestra como una pátina de corrección política para evitar cuestionamientos.
Otro aspecto ambiental es pensar en las consecuencias de mediano plazo del evento específico del trigo resistente a sequía. El cambio climático está alterando los regímenes delluvia en todos lados, cierto, pero es dudoso que este trigo sea producido solamente en zonas húmedas para hacer frente a eventos extraordinarios de sequía. La consecuencia previsible es un avance de la frontera agrícola hacia regiones sub húmedas, con consecuencias socio-ambientales mayormente negativas. En el Chaco Americano, el clima es hoy día el único freno al desmonte y la expansión de la agricultura. Este evento romperá esa frontera y la extenderá hacia zonas donde hasta hoy pensamos sería poco viable. Por otro lado, un trigo resistente a condiciones subhumedas permitiría su uso como cultivo de invierno, ayudando a evitar la erosión eólica en la región. Como se ve, los aspectos ambientales pueden ser negativos o positivos.
La última, y tal vez más acuciante, cuestión ambiental es la resistencia del trigo HB4 al herbicida glufosinato de amonio, que es 10 veces más tóxico que el glifosato. La empresa desarrolladora insiste en que el gen de resistencia se introdujo solo como un marcador molecular. Sin embargo, entre las ventajas del trigo se promociona un mayor rendimiento con aplicación del herbicida para manejo de malezas. Está ampliamente comprobado que desarrollos como la soja RR no han disminuido el uso de plaguicias sino, por el contrario, lo han aumentado frente a la aparición de resistencia en malezas.
Lamentablemente, estos aspectos ambientales no parecen ser puestos en juego en la “mesa chica” de decisiones en el gobierno y solo aspectos comerciales definen el futuro de la agricultura en nuestro pais. Cabe preguntarnos por qué sucede eso: ¿es una actitud deliberada de los representantes del poder ejecutivo? ¿Los/as ecólogos/as no tomamos una actitud proactiva para incluir el enfoque ambiental en la toma de decisiones? Son preguntas abiertas para debatir y resolver.
|
|
|
|